Servicio de mantenimiento preventivo a equipo de cómputo
Antes de realizar el mantenimiento preventivo:
Se recomienda hacer una copia de seguridad (respaldo) de toda la información importante.
Esto se debe a que, durante el proceso de revisión del disco duro, el sistema realiza un escaneo completo para detectar posibles fallas. Si el disco presenta sectores dañados, existe el riesgo de que la información se pierda o el disco deje de funcionar correctamente.
Realizar el respaldo antes del mantenimiento ayuda a proteger sus archivos y evitar la pérdida de datos importantes.
Actividades realizadas durante el mantenimiento preventivo
El técnico especializado acude en la fecha programada para trasladar el equipo de cómputo a la Coordinación de Servicios Informáticos, con el propósito de realizar el mantenimiento preventivo correspondiente.
Este servicio se lleva a cabo bajo el siguiente esquema de trabajo:
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Evaluación física del equipo: Se revisa el estado general del equipo de cómputo para identificar posibles daños o anomalías visibles.
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Limpieza interna y externa: Se realiza una limpieza completa para eliminar polvo y residuos que puedan afectar el rendimiento o la ventilación del equipo.
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Revisión de software: Se revisan los programas instalados y se eliminan aquellos que no cuenten con licencia oficial o que puedan afectar el funcionamiento del sistema (por ejemplo, adware).
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Escaneo de seguridad: Se ejecuta un análisis completo con el antivirus institucional. En caso de detectar comportamientos sospechosos, se realiza una revisión avanzada para determinar si es necesario eliminar manualmente el malware o reinstalar el sistema operativo.
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Instalación de software estándar: Se instalan las aplicaciones necesarias para el funcionamiento institucional (plugins, utilerías, suite ofimática, entre otras).
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Optimización del sistema: Se ejecutan rutinas de depuración del sistema operativo y del proceso de arranque, además de limpiar archivos temporales con CCleaner.
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Verificación de configuración: Se revisan las configuraciones del servidor de actualizaciones (WSUS) y del servidor de hora y fecha (NTP), asegurando su correcto funcionamiento.
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Chequeo y mantenimiento del disco duro: Se realiza un escaneo para verificar su estado, seguido de una desfragmentación para mejorar el rendimiento.
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Seguridad y configuración: Se actualiza la contraseña del administrador y se valida el nombre del equipo y su grupo de trabajo, de acuerdo con el área a la que pertenece.
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Actualizaciones del sistema: Se instalan las actualizaciones pendientes para mantener el equipo al día y reducir vulnerabilidades.
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Finalmente, el técnico registra todas las actividades realizadas y los hallazgos detectados en las notas del ticket asignado, dentro del sistema de órdenes de servicio.
